Filme: Lords of Chaos por Arkhon parte 3


Esta odisea se termina, y después de unos buenos complejos de paranoia de parte de Øystein, el conde va a dar el siguiente paso, hacer público el movimiento y todos los crímenes cometidos por el culto. Para esto hace llamar a un periodista y aquí es donde otra vez ese humor involuntario se hace presente, ¡Dios! la forma en la que el conde monta todo el cuerto con harta simbologia nazi, telas negra, y lo accidentado al momento de presentarse como Grishnack, simplemente es irónico a niveles insospechados, no me puedo imaginar lo accidentado que debió ser montar todo eso y, ademas, que ni siquiera el reportero le creyera, tachandolo de loco desde una primera instancia hasta que el conde le da los detalles sobre la quema de iglesias. Ahora que lo pienso, esta es otra de las escenas que hizo mucho ruido en los que criticaron las película, una vez mas, tachandola de usar clichés clásicos, sin entender que ellos mismos y el movimiento son el cliché per se, sin ellos no habría esa extraña adoración al underground. Definitivamente hay personas que aun son demasiado superficiales, carentes de esa perspicacia necesaria para entender todo el simbolismo que rodea esta película, una verdadera pena la verdad.. Como sea, es imperdible la reacción del periodista al ver las declaraciones del conde, y como en una ocasión casi le saca esa sonrisa de incredulidad al presentar su "obra" como un regreso a los orígenes escandinavos. Lo dicho en un principio de esta saga de post, ideologías completamente borrosas, tomando cosas de aquí y de allá como si fuera una especie de boutique; como si se tratara de escoger prendas en un especie de zara ideológico retorcido. Todo para hacerlo encajar en la visión de un movimiento que se caracteriza por ser errante en cuanto conceptos e ideologías, unos despistados vaya. Al final, y debido a esas declaraciones, y una incómoda sesión de fotos, el conde al fin termina en la cárcel por pirómano, aunque sin pruebas concluyentes. Esto obviamente sirvió para darle ese impulso que el Black Metal necesitaba en su momento. Convirtiéndolo en un circo mediatico, Øystein estaba claramente perturbado por todo lo que estaba pasando, por lo que lanzo su única amenaza sobre el conde, torturarlo en un bosque hast asesinarlo.

En una de las escenas, una de las mas famosas revistas metaleras contacta a Euronymous para obtener ciertos detalles sobre el movimiento que se estaba gestando, y entre la charla, salió lo de la edición del nuevo material y sobre la muerte de Yngve, increíble que, a pesar de intentar llenarse de valor para demostrar que sigue siendo una persona indiferente, en el fondo sabe que ha perdido un amigo, y un par de lágrimas han rodado por sus ojos. Esos endemoniados detalles son los que me cautivaron en el filme, esa forma tan humana de mostrar a Øystein como una persona que recién acabada de entrar a la edad adulta, y todo lo que tiene que lidiar dentro de si, demasiado humano... demasiado imperfecto. Simplemente la deconstrucción en todo su esplendor.

Volviendo al tema, el conde y Øystein tienen una charla mas y el conde es cuando recrimina la actitud tibia de Euronymous frente al Black Circle, y es que a pesar de llamar la atención de los medios, el conde aun sigue exigiendo que Øystein meta aun mas las mano para mostrar su verdadero compromiso con el movimiento, dando a notar que para el conde esto es una ideología que trasciende la música, mientras que para Euronymous, esto se trata de vender discos y salir de gira, como cualquier otro grupo de metal normal, no mas. El extremismo se ha terminado, ya tienen toda la atención necesaria, y a pesar de ver al conde como todo un rockstar, reniega de ello de manera rotunda.

Mientras por un lado, Øystein escribe una carta al que considera como su amigo, con una detallada información sobre los derechos del sello Deathlike SIlence sobre Burzum, al conde le llega el rumor de su supuesto asesinato. Por lo que, ni tardo ni perezoso, y con el contrato en mano, va a visitar a Øystein a su apartamento y, con cuchillo en mano, tienen la última discusión del filme y el desenlace de la película... verlo para creerlo. Solo un pequeño paréntesis, y es la forma en la que el conde se toma su tiempo para prepararse leche con chocolate... que te puedo decir, un lenguaje que insinúa que, a pesar del conflicto que estamos presenciando, no dejan de ser unos niños.

Hasta aquí esta pequeña narración, aderezado con mucha subjetividad, mala redacción y reflexiones personales, por lo que si no te gusta... pues ni modo, es lo que hay. En el proximo post sera un apéndice donde intentaré contraponer lo ocurrido en el filme con lo que "sucedió en realidad", así, con muchas comillas, una conclusión y mucha mas reflexiones personales, por lo que hay que estar atento al próximo post. Nos vemos.

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