Si pudiera escoger el disco mas representativo de una de mis bandas favoritas de Black Metal, definitivamente Kenose estaría por encima de todo lo que he escuchado a través de estos casi 15 años que he estado dentro de la escena. Oscuro, profundo y con una voz cavernosa que penetra en lo mas profundo de tu ser, siendo uno mismo con la teología satanista mas demencial y ortodoxa que se fusiona perfectamente con esa técnica musical tan depurada y muy bien ejecutada que, si algún novato de Internet se atreve a tocar, estaría lejos de la perfección que derrocha tremendo material.
Cada nota esta tocada con una precisión de miedo, en verdad es casi imposible imaginarse como el proceso de escritura y composición de los tres temas que componen tremenda obra.
"I" inicia con un un fragmento hablado, refiriéndose a la medida de privación de un todo, y el como los individuos serán medidos de acuerdo a su potencial, acompañado de una atmósfera opresiva, con una guitarra que solo toca unas cuantas notas y una batería un tanto minimista, tocada con una pasividad que casi mata, enfocando la atención del oyente hacia las palabras entonadas por Miko Aspa. Para después interrumpir con lo que parece un coro gregoriano y una trompeta que augura lo que viene a continuación... Un tajante blast beat y una guitarra que entra con unas notas acuchillantes, como si de una tormenta se tratara, destacan mucho esas notas que empiezan desde lo mas bajo para después rematar con un subidon a notas mas agudas, dando una sensación de rapidez bastante característico, para después entrar en tonos mas neutros y permitir que la voz cavernosa de Miko entre en acción. Después entra en un pequeño descanso para la melodía principal dando lugar a ritos mas pausados para después seguir con esa velocidad un tanto atípica dentro del genero (créeme hay pocas canciones que suenan como esta parte).
Después entra una especie de melodía mucho mas rítmica, donde la batería destaca por su versatilidad, dando a entender que la velocidad no tiene que estar peleada con partes mas melodicas. Al final no solo es atasque, sino que también pueden meter técnicas aun mas elaboradas en el hi hat mientras el bombo hace muy bien lo suyo. Ya para el final del tema, cuando creía que no tenían nada mas que ofrecer, rematan con una de las melodías mas pegajosas y depresivas de la canción, que ya de por si es bastante multifacetica. Con esto quedaras mas que hipnotizado por la forma tan magistral de terminar el tema, ya que a pesar de no ser la melodía imperante durante toda la canción termina justo como inicio, con un fragmento hablado y los instrumentos aportando una atmósfera de lo mas lúgubre posible.
Con esto damos inicio a una de mis canciones favoritas del disco. "II" entra por todo lo alto con un remate de batería de lo mas potente y lo mejor de todo, la versatilidad del vocalista para cantar con unos gruñidos difíciles de describir con palabras (en serio, dale una escuchada y sabrás de lo que hablo). Después sigue una melodía que, por todos los infiernos, se ha quedado en mi mente cada vez que escucho este tema, me enerva la sangre cada vez que escucho esa parte, esa batería tocada con una técnica magistral que nada tiene que envidiarle al resto de bandas de Black Metal. Es en este tema que etiqueta perfectamente a DSO como una banda Avant-Garde, y que se puede ser técnico, agresivo y melódico... ¡todo a la vez!. No necesita pasajes en acústico para alargar el tema. Todo es sucesión de riffs y unos muy buenos momentos de percusión que, créeme, se marcaran en tu mente, como una droga.
Ya para el final de la canción entra una de las partes melódicas mas destacable que rematan con esa sucesión de riffs que le dan esa sensación de rapidez justo como la primera canción, armando el camino para "III", con un riff sumamente pegadizo y donde la batería entra en un estado de trance que parece no querer bajar de intensidad, desde mi punto de vista es la canción mas oscura de todo el disco, dando una sensación de poderío interminable. Esos primero minutos de la canción no tienen igual y esa parte atmosférica con la cual remata esta canción es bastante hipnótica y profunda.
Gracias DSO por abrir estos oídos a sonidos que no creí que existieran, por ayudarme a entender todo lo que quería del metal extremo y dejar a un lado todo ese postureo que bandas de antaño comercializaron tan bien. Gracias a este disco por realmente hacer de la música una forma de expresión y no depender de mascaras y maquillaje que, ciertamente en la mayoría de los casos, rayan en lo ridículo.
Gracias DSO por editar el disco definitivo de Black Metal, por despegarme de lo comercial y adentrarme en el verdadero satanismo, por no seguir esa tendencia de sonar a esos proyectos infectados por el fanatismo mas absurdo de aquella masa de gente que difícilmente saldrá de su zona de confort. Así es, te hablo a ti, fan de Burzum, Behemoth, Dimmu Borgir y Cradle of Filth, que ridiculizaron este genero al grado de volverlos simples y vulgares memes.
Gracias por marcar un antes y un después en mi forma de escuchar Metal Extremo. Gracias por todo.
Hail Satan...
Hasta la Proxima.
Arkhon.
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