Retrocedamos un poco en el tiempo, en específico en el año de 1999, hace más de 10 años ya. Bandas que sonaban frescas por experimentar con diferentes sonidos que podrían parecer tan distantes entre si, pero que ya en la ejecución dejaba a mas de uno con la expectativa de ver que es lo que depara el futuro de esa fusión tan extraña como lo es el Rock - Grunge y el metal, de los cuales podría citar algunos experimentos interesantes como Seether, Godsmack o A Perfect Circle.
Todas esas bandas con un sonido facilmente identificable, que intentaba seducir al escucha con letra un poco fuerte pero que no dejaba de lado ese topico adolescente corta-venas por amor que tuvo su auge en mitad de los 2000 con el movimiento emo. Pero Staind de aquella epoca era diferente, oriunda de Massachusets, traia bastante potencia con un Hard Rock Grungero que bien se distanciaba de los Bizkits o los Korn de los cuales ya habia bastantes clones como para agregar uno mas.
Abriendo con la atronadora Suffocate, ya uno podría ver la gran capacidad compositora de la banda una banda que ya no es ni la sombra de lo que fue en su momento, incluso con el reciente lanzamiento mediocre de su disco homónimo, que a pesar de tener ciertos guiños metaleras no se compara con esta pieza poderosa de lo que yo llamaría Grunge-Core. Muy recomendado... y económico, lo conseguí por 70 pesos (5 USD).
Nótese la potencia del vocalista Aaron Lewis.
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