Délétère ha sido un proyecto que ha tenido sus altibajos en el tiempo que lleva activo el proyecto, sacando álbumes excelentes con otros que sinceramente no pasan de mediocres, aportando prácticamente nada a la escena. Pues esta no es la ocasión, y siguiendo lo establecido en el excelente álbum De Horae Leprae (el cual es un discazo, por lo que si no lo has escuchado, te recomiendo que le des una escuchada después de terminar con este), acá habrá una brutalidad constante aderezada con unos órganos en tono misa fúnebre, voces profundas limpias que entra en el espectro vocal de un barítono, así como los acostumbrados shrieks del género. Es corto en duración, si, pero es lo suficientemente bueno como para no necesitar de más tracks, y aunque la sensación de querer más impera en un servidor, la verdad quedó muy satisfecho con el resultado, no podía pedir menos de un proyecto que siente una pasión por el Black Metal en cada riff, nota y acorde que componen este EP, un buen trabajo.
Lo bueno: Caótico al grado de que casi llega al Raw Black Metal, lo cual es de agradecer.
Justo cuando pensé que no volvería a escuchar nada nuevo de este proyecto, llega este 2019 con un álbum con el sello distintivo de la banda, el cual se caracteriza por un estilo crudo, poco pulido y con unas atmósferas en los teclados que hacen de esta experiencia algo inigualable. Jusqu'à la Mort, el primer track, es la clara muestra que la evolución mostrada en su anterior trabajo Lys Noir, sigue tan presente en este material, subiendo aún más sus estándares en cuanto a composición se refiere. Nunca pasó por mi cabeza que este material llegara a ser tan bueno, hasta el grado de repetirlo en más de una ocasión y atrapandome haciendo headbanging con la asombrosa Le Serment Prononcé, acompañado de esa bella guitarra acústica para después romper con la voz desgarradora de Patrick y un Blast beat digno de las invocacion pagana.Ya para Le Grand Deuil, y con esa intro de lo que parece ser cellos, podemos afirmar que este será otro álbum de excelente manufactura que tendrá que estar en tu estantería si o si. Un muy buen trabajo.
Lo bueno: Obviamente la producción se me antoja sucia y un tanto descuidada, dandio un sentimiento de desolación típica de Monarque.
Le estuve dando muchas vueltas a este material durante meses, y no por que precisamente sea malo, al contrario, mientras más lo escucho más me adentro en el concepto que traen estos canadienses entre manos. Adore es, una muestra de los alcances del Post-Black Metal en su máxima expresión, y es que los primeros acordes de canciones como Portrait of Pieces o Adore me deja con esa mala sensación de no haber hablado de este material en su momento, pero nunca es tarde para encumbrar lo que probablemente sea uno de mis discos favoritos de Black Metal del año, junto a un peso pesado como lo es Cartographs, que en cuanto sonido son muy similares, trayendo consigo un estilo que pense que habia muerto con la disolución de Altar of Plagues, pero que revive debido a la genialidad de bandas como estas. Versátil, dinámico y con una batería excelentemente bien ejecutada, no te puedes perder de esta joya que pasará la posteridad como uno de los álbumes más destacables del 2019. Muy recomendado.
Lo bueno: Un estilo técnico pero escuro, desolador pero con unas ideas perfectamente ejecutadas a lo largo de los casi 45 minutos que dura la grabación.
Lo malo: Absolutamente nada de malo.
Tracks Recomendados: Seria muy facil decirte todos, pero si quieres darte un quemon de la capacidad técnica, tienes que escuchar And Nothing Was the Same, Coma, Horizon o la bella DDHS.
Es complicado pensar la última vez que Tool sacó música, y es que tan solo tener en la cabeza que 20,000 days salio hace 13 años, a uno lo pone un poco nostálgico, y no es para menos, ya han pasado cientos de cosas a través de todos estos año en los que esta banda estuvo ausente. Tool es un obligado dentro de una lista de reproducción de rock decente, y eso es debido principalmente a que, en muchos aspectos, representan un parteaguas en el cómo percibimos un género que a veces se siente tan libre pero a la vez tan bastardeado, lleno de genialidades (como Radiohead, Blur o Sonic Youth) y otras cosas que prefiero evitar y olvidar por el bien de la cordura de un servidor (todo el Glam Rock ochentero). En esta ocasión, y para los que no están acostumbrados a un estilo que no busca los ritmos fáciles y pegadizos, con el cual las masas puedan corear en algún evento multitudinario. Tool ha regresado igual de rebuscado y pretencioso como siempre, aunque se que esto suene un tanto cruel, no quiero llenar de alabanzas un álbum que obviamente ha llenado de manera satisfactoria todas mis expectativas, pero tampoco quiero perder esa objetividad que he estado buscando todos estos años, ya que el fanatismo que recorre mis venas nublan mi tan buscado juicio crítico y no quiero parecer aquel tipico fanboy que pierde la cabeza cuando algún artista favorito hace algún movimiento. Asi que aqui estoy, intentando ver cómo abordó este material traído de las manos de Maynard y compañía, pensando en lo mucho que me divertí tomando un par de cervezas hace unos meses mientras escuchaba clásicos como The Pot, Stinkfist, Lateralus, Vicarious, Forty Six & 2 o la obra maestra llamada Schism, por aquella época no tenía ni idea de que Tool sacaria nuevo album, solamente era yo, la lista de reproducción de Youtube, unas cuantas cervezas y los clásicos cigarrillos, pensando en absolutamente nada, inmerso en un vacío tanto emocional como existencial mientras que los acordes poco habituales e inhóspitos me guían en una penumbra que se siente, irónicamente, confortable. Fear Inoculum viene pues, como una de ese cine de arte de inicio lento, con una idea desarrollada principalmente para ser una obra 100% contemplativa, por lo que si esperas algo más rimbombante, te sugiero que de inmediato pauses el reproductor y te busques alguna de esas bandas de rock genérico que pululan en el y que poco o nada tienen que aportar a la escena. La reivindicación de este género viene de la mano de unos Tool ya bastante maduros pero con reminiscencias más que evidentes, como por ejemplo en la canción Pneuma, el primer acorde de la guitarra suena increíblemente familiar a Schism, salvando las diferencias claro está, por que una vez que inicie el tema te darás cuenta que el sonido es diametralmente opuesto al clásico antes citado, pero escuchar esos primeros compases hizo que se me erizara la piel y lo primero que llego a mi mente fue "esto es Tool en toda su gloria". Los temas son largos, pero son la media de aquellos oídos acostumbrados a temas de diez minutos o más, y con eso me refiero que si eres un asiduo oyente del Atmospheric Black Metal, no sera ningun impedimento para disfrutar de la obra de arriba abajo, incluso tiene unos pequeños interludios entre algunas canciones para darle un efecto más dramático. Para los eruditos en la música, tendrán bastante tiempo para desmenuzar un material que obviamente tiene la particularidad tener composiciones calculadas de manera matemática, donde el número 7 tiene una presencia omnipotente a lo largo de los 10 temas que componen dicho álbum. Ya para terminar, que he estado divagando de manera grosera a traves de este post, he de decir que este es quizá uno de los discos que ha llegado a la cúspide de la maduracion de Tool como banda de culto, recordando lo mucho que han pasado los años a través de este cuerpo que se va marchitando conforme pasa el tiempo, y el tan solo pensar que ya rebasó los 30 años, quiero envejecer tranquilamente escuchando el que quizá, se el mejor disco de esta década a punto de terminar, dentro de unos diez años quiero visitarlo y que esa sensación de añoranza siga tan presente como la primera vez que lo escuche. Un excelente trabajo.
Lo bueno: Es Tool.
Lo malo. Nada que destacar.
Tracks Recomendados:Pneuma y 7empest vendrán siendo la perfecta introducción de los no versados en Tool.