Dark Souls 2

 



Después de mi odisea a través, primero, por Dark Souls y después por Demon's Souls no es tan difícil entrever que esta entrega es una extraña combinación entre estos dos mas unos cuantos detalles extras que hacen muy cómoda la experiencia, para empezar tenemos un inventario mejor organizado, un sistema de invasiones no tan intrusivo gracias a la opción de quemar las efigies en las hogueras, animaciones mas trabajadas en cuanto a los Parry y ataques por la espalda, los caminos difíciles de recorrer, incluso mas difícil que la pelea con el jefe en turno. Este es un  juego donde enfatiza mas el viaje arduo que una pelea digna contra los jefes, y creo que aquí he llegado a mi primer problema con esta entrega, los jefes dejaron de ser el platillo principal para volverse harto montoneros, poco memorables y bastante genéricos para mi gusto. Al principio todo estaba bastante bien, el gigante y el perseguidor son peleas bastante aceptables (en especial este segundo), pero por lo demás deja una extraña sensación agridulce y da el presentimiento de que el copiar/pegar fue una constante un tanto perezosa de parte de los desarrolladores. Si tan solo me dieran a pensar sobre los jefes de las anteriores entregas, rápidamente pienso en Manus, Ornstein y Smaugh, El Rey Allant o el impresionante Dios Dragón. Aquí solo hay espacio para Vendrik o el Antiguo Dragón y poco mas, que por desgracia decidieron hacerlos jefes completamente opcionales, quitándonos el merito de una pelea memorable contra seres que podrían ofrecer un reto mas que decente, ya que el resto se siente como un obstáculo mas que como un reto a vencer.

¿Ves ese hermoso tráiler que nos presentaron años atrás? Pues que crees, este uno de los aspectos que mas deplorables y decepcionantes del juego. Señoras y señores, he de decir ante ustedes que Dark Souls 2 se ve feo, presentando texturas con picos, escenarios que se cargan a plena vista, tiempos de carga tediosos, mala conexión entre escenarios, bajones horribles de encuadre (Frame Rate) y un sin fin de detalles que rompen completamente la experiencia y la inmersión queda en un segundo o hasta en tercer plano. Nunca tuve problemas con eso en Dark Souls, y si al menos para este hubieran conservado mínimamente esa calidad que nos presentaron años atrás, hubiera ganado un poco mas de puntos. No esta tan roto como lo podría estar un Mass Effect o un Downpour, pero deja mucho que desear para aquellos que esperábamos un juego de mejor manufactura de From Software. Esta vez si que se quedaron cortos y ni la expansión Scholar of the First Sin lo salva de esta podredumbre. Pero bueno, ya para rematar, hablemos un poco de la historia, superficialmente es una propuesta interesante, un mal que viene de los mares provocando una guerra entre un reino prospero y unos gigantes llama mucho la atención. Desgraciadamente esa necedad de contar la historia con referencias del juego anterior es algo que me molesto en exceso, al punto de simplemente ya no poner atención y simplemente centrarme en las peleas. No quiero ahondar mas por que, como saben, ustedes mis estimados lectores son los que tienen la ultima palabra. Claro que si pudiera resumirlo en pocas  palabra, seria como la entrega mas innecesaria de la serie.

Hasta la Próxima.

Arkhon.