¿Se acuerdan que hace un tiempo reseñe a una estupenda banda de Black Metal llamada Sanguinary Trance? Pues aquí vas a encontrar un estilo similar. Esta vez nos trasladamos directamente a Brasil, donde unos talentosos músicos nos traen un estilo de la vieja, cuando el Black Metal ya se había asentado y la segunda ola de bandas estaban haciendo de las suyas en la escena. Para esta ocasión, el estilo es un poquito más heavy de lo habitual, ya que los dos primeros minutos suenan demasiado thrasher, con una guitarra un poco descuidada en el sonido y una batería perfectamente ejecutada. Para después dar paso al clásico riffeo veloz característico del Black Metal y, a continuación, dar paso a la voz rasgada y potente. Una muy buena voz cabe destacar. A pesar de ser solo una canción, parece que fue hecha a partir de una impro de garaje, ya que la sucesión de ritmos es diferente a cada minuto que pasa. Los compases cambian de manera coherente durante los 10 minutos que dura el tema, hasta el grado de tomarse el privilegio de meter una guitarra semi-acústica en todo el caos. La segunda parte del tema, es un poco más lenta y tradicional, con melodías más cercanas al Black que al Thrash, por lo que viene siendo una pasada escuchar tremendo material que se está cociendo aquí. Buen Trabajo.
Lo bueno: Esto es Black Metal señores, sin filtro y con una potencia sin igual. El tema se disfruta de principio a fin y si de paso los escuchas con unos buenos cascos, veras de lo que son capaces estos señores.
Lo malo: Un tema... ¡Queremos mas de Isfet!
4 estrellas de 6: Decente.
Hasta la Próxima.
Arkhon.
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