Ha sido un inicio de año bastante turbulento en cuestión a entretenimiento se refiere. Veo la PS4 bastante lejano y probablemente se la ultima consola que adquiera dentro de poco. ¿Por que aun no la he comprado?, dirán ustedes, pues por la sencilla razón de que la vida es muy cara en un país tercermundista como lo es México, y el poder adquisitivo se vuelve cada vez mas escaso entre los que vivimos con un poco mas del salario mínimo. Además, ¿Qué propuestas tienen para que yo tomen al fin la decisión de poder adquirirla? No muchas realmente: Bloodborne, The Witcher 3 y poco mas son los que llaman fuertemente mi atención. ¿MGSV? ya no gracias, estoy harto de ese tratamiento de la historia tan diluido a través de una exacerbación exagerada de un ego que ni Justin Bieber es capaz de exudar en su día a día. ¿Rise of the Tomb Raider? creo que aquellos que leyeron mi review del original ya sabrán que opino. ¿Mass Effect? Ja ja, es en serio ¿verdad?. Ni Assassin's Creed ha logrado que yo llegue a tocar alguna entrega debido a la enfermiza obsesión de entregar anualmente una historia que dejo de ser Assassin desde ¿El tercero supongo?. Y ahora desde la salida de Street Fighter V es cuando reflexiono si realmente vale la pena invertir lo de medio año en una entrega que parece mas una Beta que un juego hecho y derecho. Ya se había hecho anteriormente, y Ground Zeroes fue un experimento social que puso a prueba la fe que tuvimos en alguna ocasión sobre todo lo que hacia Kojima. Ahora no es mas que un recuerdo absurdo sobre un juego que poco o nada tiene que aportar a una saga que debió terminar hace diez años. Es lamentable que esa mentalidad japonesa de extender las cosas hasta la saciedad y en algunos casos hasta el hartazgo siga persistiendo en una época donde cosas como Roma, Tudors, Breaking Bad o Mozart en la Jungla tengan una excelente calidad sin necesidad de tener mas de 700 capítulos (de los cuales 500 son meramente relleno), entregando historia concisas, concretas y sin tanta palabrería que solo hace que a uno se le reviente mas de una ulcera gástrica, y que mucho del publico que consume ese tipo de cosas japonesas no tengan el suficiente criterio de poder separar historias buenas sobre un relleno insustancial moralista tan simple que un niño de kínder en este momento podría considerar como inmaduro e intragable. Que quede esto como antecedente lo mucho que detesto el anime y manga, lo siento si hay Otakus en la audiencia.
Pasando a otras cosas, veamos ahora Deadpool... y aquí es cuando tiemblo e intento aventar mi teclado al monitor el tan solo acordarme lo increíblemente mala que es la película, de verdad, es tan mala que ni la versión original lo salva de ese fango lleno de pestilencia en el que se ve hundido dicho film. Bromas de mal gusto, referencias obvias, acción sosa y una trama que se traduce en "la damisela en peligro" hacen de este como un producto hecho para complacer a esa masa de gente que disfruto de basura como "The Hangover" o "Scary Movie", mejor me regreso al soldado de invierno o el reciente "The Revenant" por que una vez mas los super héroes han quedado muy por debajo de lo esperado. Ya ni hablemos de los comics por que "Superman Doomed" es el perfecto somnífero para aquellas noches que no puedas conciliar el sueño. Un excelente inicio empobrecido con relleno que no aporta nada y que al final ese virus solo haya sido una molestia que una verdadera amenaza como lo pintaba en un principio (los que lo leyeron sabrán de lo que hablo).
En fin, podría seguir hablando de todo aquello que me sigue molestando (como el final de Breaking Bad) pero hay que dejar ideas para futuros y no quiero amargarme el excelente material que estoy escuchando para la siguiente review. Nos vemos en la próxima y espero estas reflexiones no hieran susceptibilidades, aunque por ser internet... es pedir demasiado.
Hasta la Próxima.
Arkhon
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